El 24 de marzo es el día en el que se recuerda en Argentina a las víctimas de la última dictadura militar que usurpó el poder entre el 24 de marzo de 1976 y el 10 de diciembre de 1983.
Tiene el objetivo de hacer comprender sus graves consecuencias sociales, económicas y políticas así como de comprometer a la ciudadanía en la defensa de los derechos constitucionales y del régimen político democrático.
Devino efeméride nacional en 2002, a partir de la movilización por los Derechos Humanos, iniciada ya en contexto de dictadura y ampliada a partir de 1984, con lo que tiene el mérito de resultar de una exigencia social y no solo de una voluntad gubernativa.
Es una fecha que intenta construir una memoria respetuosa de las luchas sociales, denunciar los atropellos autoritarios, exigir una investigación que resuelva los crímenes de las desapariciones, torturas, prisiones, sustitución de identidades y robos materiales, y reparar experiencias traumáticas producidas por el terror de Estado, que se concretaron en víctimas singulares pero que afectan a la sociedad entera.