Qué pasó el 2 de abril?
El 2 de abril de 1982 tropas argentinas desembarcaron y tomaron el control de las islas Malvinas.
En esos días, en pleno contexto de terrorismo de Estado, se vivía una aguda crisis: tres días antes del desembarco, la CGT había declarado una huelga general bajo el lema “Paz, Pan y Trabajo” que fue duramente reprimida por la dictadura.
En un primer momento, el desembarco en las Malvinas generó entusiasmo entre la población. Se organizaron movilizaciones y campañas de solidaridad.
La prensa ofreció una imagen triunfalista que se mantuvo aun cuando el 1 de mayo comenzaron los bombardeos británicos. Un día después, el hundimiento del ARA General Belgrano clausuró cualquier expectativa de resolución diplomática del conflicto. Fue allí entonces que comenzaron los
combates por aire, mar y tierra que duraron hasta el cese del fuego, el 14 de junio.
En la guerra murieron 649 argentinos. Más de 23.000 soldados, suboficiales y oficiales estuvieron en el teatro de operaciones. En una importante proporción, soldados conscriptos conformaron las filas del Ejército y la Marina; también existieron muchos casos de alistamiento voluntario. En
homenaje a los muertos y los sobrevivientes, desde el año 2000 se conmemora el “Día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas”. La guerra representó un punto bisagra en la historia reciente. Muchas investigaciones la consideran el principio del fin de la última dictadura. Tras la recuperación de la democracia, la Reforma Constitucional de 1994 incorporó la Disposición Transitoria Primera, que declara imprescriptible el reclamo argentino de soberanía en las islas Malvinas, otras islas del Atlántico Sur y espacios marítimos circundantes, y ordena que el reclamo se realice siguiendo vías exclusivamente diplomáticas, de modo acorde con el derecho internacional. En los años de la posguerra, quienes pelearon en Malvinas tuvieron que organizarse para ser reconocidos socialmente. Mientras denunciaban un clima de creciente “desmalvinización”, sus demandas no conseguían respuestas adecuadas en el sistema de seguridad social. Muchos testimonios aseguran que los numerosos suicidios que se produjeron en este período obedecieron a este contexto tan crítico. Aunque la efeméride alude a los “veteranos”, las mujeres también fueron protagonistas de la guerra, como instrumentistas quirúrgicas y enfermeras; como personal a bordo de aviones que trasladaban heridos de las islas al continente; como oficiales o personal de buques mercantes con tareas logísticas; o como parte de operaciones de inteligencia.
Sólo recientemente sus historias comenzaron a visibilizarse. En 2012, una Resolución del Ministerio de Defensa reconoció las actuaciones de algunas de estas mujeres y las filió históricamente con Manuela Pedraza y Juana Azurduy.
Sus historias se entraman con las de otras mujeres vinculadas a Malvinas, como María Sáenz, Cristina Verrier o las maestras que enseñaban español durante los años setenta. Por esta razón, a 38 años de la guerra, podemos decir que el enunciado “Las Malvinas son argentinas” resultó una construcción colectiva, en la que las mujeres argentinas tuvieron un rol destacado.
¿Quiénes son las mujeres veteranas?
Aunque la efeméride alude a los “veteranos”, las mujeres también fueron protagonistas de la guerra, como instrumentistas quirúrgicas y enfermeras; como personal a bordo de aviones que trasladaban heridos de las islas al continente; como oficiales o personal de buques mercantes con tareas logísticas; o como parte de operaciones de inteligencia.
Sólo recientemente sus historias comenzaron a visibilizarse. En 2012, una Resolución del Ministerio de Defensa reconoció las actuaciones de algunas de estas mujeres y las filió históricamente con Manuela Pedraza y Juana Azurduy.
Sus historias se entraman con las de otras mujeres vinculadas a Malvinas, como María Sáenz, Cristina Verrier o las maestras que enseñaban español durante los años setenta. Por esta razón, a 38 años de la guerra, podemos decir que el enunciado “Las Malvinas son argentinas” resultó una construcción colectiva, en la que las mujeres argentinas tuvieron un rol destacado.
La Música y Malvinas
Asimismo, la música en diversos intérpretes como así también, en variados estilos ha reflejado con los años la guerra de Malvinas, desde el folclore hasta el rock nacional. Precisamente sobre este último, el 2 de abril de 1982, cuando las tropas argentinas, por orden del dictador Leopoldo Fortunato Galtieri, desembarcaban al norte de Puerto Argentino, en las islas Malvinas, el rock argentino cargaba sobre sus espaldas con unos 15 años de trayectoria, y desde hacía rato se había convertido en un altoparlante que transmitía la mirada que sus artistas tenían sobre la realidad que lo contenía.
Y la Guerra de Malvinas fue, y sigue siendo, un tema que el género hizo propio desde una cantidad de canciones que, desde diferentes perspectivas y en forma de reflexión, descripción, homenaje o crítica, lo abordaron a través de los años que pasaron desde entonces.
Aquí, a continuación elegimos una estrofa de una de ellas, compuesta, grabada y publicada durante décadas al cabo de las cuales muchas heridas aún siguen abiertas.
“Para la vida” - León Gieco (2005)
“Volví a mi casa de rodillas y aquí/Mis amigos muertos/En un país enfermo, todas las cartas sobre la mesa/Jugamos juegos perversos entre fútbol y guerra/Sangre de gloria, odio contra amor/Dioses y bestias, locura y dolor”. La voz de León describe la realidad de muchos, de una manera descarnada a la vez que poética.
La canción fue parte de la banda sonora de “Iluminados por el fuego”, una película argentina dirigida por Tristán Bauer, estrenada en 2005. El filme, una ficción inspirada en el libro homónimo escrito por Edgardo Esteban, narra las experiencias de Esteban Leguizamón, un excombatiente de la Guerra de Malvinas.
Aunque , nada emociona más como cantar una y otra vez, ese bello himno, que se llama la “Marcha de las Malvinas” , canción oficial de la República Argentina, compuesta mucho antes, en 1940, por Carlos Obligado en colaboración con José Tieri, y dedicada a la reivindicación argentina de soberanía sobre las Islas, la cual compartimos para recordarla y entonarla una vez más…
“Tras su manto de neblinas,
no las hemos de olvidar,
“Las Malvinas Argentinas”,
clama el viento y ruge el mar.
Ni de aquellos horizontes
nuestra enseña han de arrancar,
pues su blanco está en los montes
y en su azul se tiñe el mar.
Por ausente, por vencido
bajo extraño pabellón,
ningún suelo más querido,
de la patria en la extensión.
¿Quién nos habla aquí de olvido,
de renuncia o de perdón?
Ningún suelo más querido,
de la patria en la extensión.
Rompa el manto de neblinas,
como un sol, nuestro ideal:
“Las Malvinas Argentinas
en dominio ya inmortal”.
Y ante el sol de nuestro emblema,
pura, nítida y triunfal,
brille, oh, Patria, en tu diadema,
la perdida perla austral.
¡Para honor de nuestro emblema
para orgullo nacional,
brille, oh, Patria, en tu diadema,
la perdida perla austral.
Brille, oh, Patria, en tu diadema,
la perdida perla austral. –